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Te mueres por ser Walter White y resulta que tienes un hijo pequeño, al que lo transformas en tu ayudante Jesse Pinkman y a una mujer con cara de haber comido acelgas, y la conviertes en Skyler White et voilà, ya tienes el disfraz en familia más guapo: Breaking Bad. Si tienes un cuñao, ofrécele ser Saul.
Eso sí, procura que sean tus amigos del gimnasio o, al menos, comprad esos falsos músculos de gomaespuma porque, si no, va a quedar un pelín de película 300 spanish versión, con el flotador y el pelamen. Pero bueno, es una idea super original para disfrazarse en grupo, ya sea Halloween o carnaval. Me la apunto.
En Halloween puedes disfrazarte, decorar tu casa… y también tunear tu coche. Esta es una idea super chula, unos pies humanos llenos de sangre saliendo del maletero con un cartel que diga: mi ex novio.
Fresas rellenas de Nutella… la comida del paraíso.