Venga, vamos a reconocer que lo de hurgarse la nariz en un semáforo es de las cosas más placenteras del mundo. Pues parece ser que ¿a principios de siglo? había hasta una guía que te recomendaba cómo hacerlo correctamente. Todo muy WTF.
Momentos en los que no deberías hurgarte la nariz: cuando estás detrás de unos comentaristas de televisión y hay una retransmisión en directo, pero espera, fíjate en ese guiño del final, ¡lo ha hecho a posta! Troll!